miércoles, 25 de mayo de 2011

~ Por las calles de la muerte, donde ya no hay más lugar, donde ni siquiera Monalisa se atreve, nena, a mirar; por las calles del olvido, por las de la realidad, donde se conocieron, una noche como hoy, la flaca Pili y el negro Tomás.
Ella le dijo, como acostumbrábamos decir: -Llevame a ver las estrellas, llevame a decir sí, sí, sí, sí.
Ah ah ah ah, la flaca Pili y el negro Tomás ♪♫
-De algún lado te conozco- entre dientes el negro sucio susurró -y aunque todos rían lo que digo y sin sentido, todavía creo a simple vista en el amor... No es de un chiste que te tengo, si de viaje recién vengo; sé que soy un soñador. Con respecto a tu propuesta, no vaciles mi respuesta que es 100% sí, sí, sí, sí.
Ah ah ah ah, la flaca Pili y el negro Tomás ♪♫
Por las calles sin sentido, donde sé que algunos pocos van, donde Dios y el diablo se juntan a menudo a fumar esa bendita pipa de la paz; por las calles de la muerte, por las de la realidad, donde ni siquiera los molestos se atreven, nena, a molestar, con tinta china el negro se tatuó una frase, una frase que decía... "Pili I love" Hey!

Ah ah ah ah, la flaca Pili y el negro Tomás ♪♫

lunes, 16 de mayo de 2011

.Desnudarte, no de cuerpo, sino de alma;
disfrutar ese p l a c e r

sábado, 14 de mayo de 2011

Y ahora se duerme; su sueño empieza a crecer. No sabe lo que es mañana, sólo aprende lo de hoy. Brilló tu alma cuando nació.
Despierta con la mañana, el sol todo iluminó; llorando nos muestra el hambre con su expresión. Así la vida quizás nos pide perdón.
Mi sueño vuelve a rodar en sus ojos, en mis ojos, en su amor.
Me siento y miro sus pasos, viviendo su propia razón. Me invita a un mundo que hoy inventó para que juguemos los dos.
Mi sueño vuelve a rodar en sus ojos, en mis ojos, en su amor
Y ahora se duerme.-

viernes, 13 de mayo de 2011

~ Paseando en el bosque la vista cruzó con la más dulce mirada que en toda su vida jamás conoció. Desde ese mismo momento el hada y el mago quisieron estar solos los dos en el bosque amándose siempre y en todo lugar.-

domingo, 8 de mayo de 2011

Primero, una sonrisa; la mejor forma de empezar. Poco a poco se acercaban, y entre caricias y palabras el amor se dejaba ver, y la pasión los envolvía lentamente, encerrándolos en un mundo aparte, donde nadie más que ellos importaba, y todo lo que había alrededor dejaba de existir. Una última mirada, y sus labios se acercaron, comenzando el beso más largo y sincero de sus vidas, sintiendo exactamente lo que el otro sentía, acompasando sus respiraciones, convirtiéndose en una misma persona, creyéndose parte de un sueño perfecto quizás, con la sensación de que nada podría ser mejor, y deseando que el tiempo se hiciera su amigo y congelara los minutos para hacer de éste un momento eterno. Nunca habían vivido algo así, y no podían creer lo que estaban compartiendo, todo era tan perfecto que no había manera de arruinarlo; él la tenía a ella, ella lo tenía a él; no había nada en el mundo que pudieran desear más que eso. El tiempo pasaba, y la pasión crecía, y junto con ella crecía la paz que llenaba sus almas. No quedaba más por decir, las palabras sobraban en esos momentos, no hacía falta repetir lo que ya bien sabían los dos. Sólo se limitaron a expresar su amor con el lenguaje corporal que juntos habían aprendido y practicado, y sólo eso bastó para entender que habían alcanzado la mayor felicidad, y que nada ni nadie acabaría con ella, porque el amor que tenían era I N F I N I T O.-

sábado, 7 de mayo de 2011

 Acá está -aunque las fotos no sean capaces de mostrar con precisión su belleza- el atardecer del 6 de mayo...
Parecía ser que el cielo se había puesto de acuerdo con las nubes y con el Sol para darme un maravilloso atardecer, sabiendo que éste sería el primero de mis 17 años.




Y la temperatura -elevada con relación a los días anteriores-, también estaba haciendo lo suyo para que pueda disfrutar aún más de esas horas que, a mi parecer, son las mejores del día






 Cada pedacito de cielo se veía impecable, y los rayos de Sol parecían querer quedarse allí más tiempo, haciéndome sentir que era un día especial, diferente a los demás.


Así terminaba mi primer día con 17 años; comprendí que éste había sido el regalo que la Naturaleza me tenía preparado, deseando que empiece esta edad con esa paz que ella tan bien sabe darme.

martes, 3 de mayo de 2011

Me faltaba decirlo por acá:

Feliz mes amor. Te amo infinitamente.