Voló el 2011... El mejor año de mi vida hasta ahora, aunque muchos digan que fue una mierda... Creo que nunca tuve un año tan bueno en tantos sentidos. Ni falta hace hacer un balance para darme cuenta de que tuvo mas pros que contras. Fue un año de viajes, lo empecé en Cuba, vacaciones inolvidables, y meses más tarde llegó el tan esperado viaje a Irlanda y Londres, que dejó en mi miles de recuerdos, anécdotas y enseñanzas imposibles de olvidar. Poco después el clásico viaje de egresados a Bariloche, hermoso lugar, un gran viaje. Y para darle un cierre a este año de idas y vueltas, en pocas horas parto para Brasil, a recibir el año nuevo de blanco y con la alegría brasileña. Memorable último año de secundaria, quinto año, el fin de una etapa, el comienzo de otra. Año especial por donde se lo mire. El cierre académico fue impecable, con notas que me dejan satisfecha y un "hasta pronto" para todos aquellos profesores que, de alguna forma u otra, marcaron mi secundaria. Buen año para el fútbol también, claro que sí, mi tan amado Boca Juniors campeón invicto del apertura, que orgullo, que alegría! Lindos recitales (aunque hayan sido tan solo dos), increíbles, La Renga en abril, un recital para no olvidar, o mejor dicho, una noche para no olvidar, con todo ese barro, toda esa gente, todo lo que hubo que caminar por el campo, saltar zanjas, pasar por alambrados; y las canciones, increíbles, llenaron mi alma. Y en diciembre, Ciro y Los Persas, que buen recital, por momentos podía sentir que estaba escuchando a Los Piojos en vivo, como en los viejos tiempo, un recital excelente, y con una duración de 3 horas. Pero lo más importante de este año, lo que realmente lo marcó, lo primero que se me viene a la cabeza cuando pienso en todo lo que viví, fue haber encontrado al amor de mi vida, haberme dado cuenta de que somos el uno para el otro, sentir que mi vida sólo tiene sentido a su lado. Este año no habría sido lo mismo sin él; me dio lo mejor que alguien pudo darme en toda mi vida, llenó mi alma por completo, me dio toda la felicidad que andaba buscando, me dio paz, me dio el amor más puro y sincero que se puede sentir, tiene mi corazón y sabe cuidarlo mejor que nadie, es mi complemento perfecto, mi gran amor, es todo lo que necesito para ser feliz. Y si tuviera que decir qué fue lo mejor de este 2011, no se me ocurre otra cosa que no sea él (a pesar de todas las hermosas cosas que viví), porque con él pasé, desde aquel inolvidable 3 de abril, los mejores momentos de mi vida, con él fui inmensamente feliz, y él estuvo ahí a cada instante, para hacerme sentir bien si estaba triste, para compartir alegrías, para darme apoyo, para todo, TODO lo que necesitaba, él estuvo ahí, y su compañía fue la mejor en toda ocasión. Por eso, mi amor, te digo GRACIAS por haber hecho de este año el mejor de todos, gracias por compartir conmigo tu vida, gracias por llenarme de recuerdos maravillosos, gracias por hacerme descubrir otra forma de ver las cosas, gracias por todo lo que me fuiste enseñando, gracias por cada cosa que hiciste por mi día a día, y gracias por imaginar conmigo un futuro juntos, sos mi vida, sos lo mejor y lo más hermoso que tengo. Espero que mis años sigan siendo maravillosos a tu lado. Te amo infinitamente, hoy y para siempre.